El debut discográfico de Aramea: Capitalinos apadrinados por el Puerto

El trío de rock alternativo estrenará en mayo su primer disco, bajo la producción y consejo de nombres locales del rock.

El caso de Aramea extiende las posibilidades de nuestras pautas. Una banda capitalina, pero con gestión y espíritu porteño. A poco de lanzar su single, “Letargo” este 24 de abril, también se preparan con su disco debut Solsticio, que será lanzado el próximo 8 de mayo.

Su registro fue íntegramente grabado en los Estudios Mescalina, de Valparaíso, con la producción de Jurel Sónico y co-producción de Naty Lane, miembr@s de Adelaida. “Valparaíso siempre nos transmite un aire de frescura, tener el mar cerca para un santiaguino es muy extraño, entonces estar en ese entorno trabajando es algo que nos encanta y nos parece mágico“, responde Flavio Zárate, bajista de la banda –en representación de ésta–, a Niña Provincia, cuando es preguntado sobre la realización del álbum.

Con dos EPs a su haber, Ab Initio y Amapolar (2016), esta agrupación apuesta por el rock alternativo, en términos genéricos, con un sonido de efectos pedaleros y la presencia de reverberaciones. Todo al más puro estilo del rock de Seattle y otros clásicos contemporáneos del género.

Una dualidad sonora

Aramea se integra por Matías Montecino (voz y baterías), Sonic Verdejo (guitarra y voces) y Flavio Zárate (bajo y voces). Sus inicios se remontan al 2015, cuando conformaban un taller de rock en el Colegio Santa María de Santiago. El profesor les presentó –junto a un primer guitarrista– y la afinidad fue instantánea. Aquí, sus influencias más tempranas remontan a Pearl Jam, Nirvana Joan Jett y Los Prisioneros.

Desde ahí, es que su disco Solsticio, venga a concretar un trabajo musical de casi 6 años, gestionado por las ganas de sonar con registro propio y apuntando a agentes clave para concretar toda esta imagen. En búsqueda de ese sonido y de su afinidad con la música de Adelaida fue como llegaron a Valparaíso.

Grabaron su segundo epé en HISS Records y forjaron amistad con su responsable: Jurel Sónico. Él continuó con la producción actual, y sumó a Naty Lane en la co-producción, además de la presencia de Matías Saldías y Rubén Verdugo en los estudios de Mescalina. “Decidimos pedirle a Jurel si podía ser el productor del disco debido a que ya habíamos trabajado con él antes, conocía el concepto que queríamos lograr y que queríamos plasmar en este LP”, relatan.

En un aspecto más reflexivo, el concepto de esta producción traspasa el entendimiento de un contexto socio-cultural, “bajo mucha presión individual, felicidad y abandono”, según cuentan sus integrantes, para dar espacio al entendimiento del individuo, con la complejidad que representa el ser; desde sus personalidades, vivencias que le representan, y una idea dual entre su luz y su oscuridad. Una idea también presente en el arte de la portada, a cargo del collage de la artista porteña, Nara Massena.

Nosotros pensamos en la dualidad como algo propio de cada ser, como la lucha o paz interna pueden generar situaciones importantes en la vida de las personas. En Solsticio sentimos aquélla dualidad en el sonido, baterías, guitarras estridentes, voces suaves, momentos de descanso y un caos que reorganiza al panorama musical del disco”, añaden.

A la distancia

Y aunque territorialmente se centran en Santiago, y se lleven bien con el entorno musical, dicen no sentirse propiamente parte de una escena, “no porque no nos guste esta, sino porque somos una banda que siempre está en busca de surgir, en constante movimiento y tratando de mostrar nuestro arte en todos los escenarios, lugares y puntos de reunión”, aclaran.

De hecho, la banda quería girar por el norte y el sur, para desprender su trabajo de la capital. Y con eso, también iban a rodar y lanzar su disco en vivo; todos planes que han visto ofuscados por la actual pandemia. En cambio, ahora se reorganizan para estar omnipresente en redes y desde el espacio virtual, manteniendo un itinerario de lanzamiento digital, con el apoyo de su sello, Lagartijarecords.

¿Cómo se reorganiza el trabajo musical y artístico de forma remota y entre crisis (sociales y sanitarias)? ¿Qué han aprendido de estos tiempos y su oficio?

En este momento nos hemos dado cuenta que en chile las artes tienen su mayor campo en la vida presencial. No están vistas como un recurso de primera necesidad, puesto que muchos artistas y productoras han quedado limitadas al espacio infinito de las redes sociales. Sabemos que la música busca ser escuchada, y para esto recurrimos a la distribución digital, que en este momento es lo más eficiente.

También hemos aprendido que somos seres sociales, una sociedad que busca aprender en comunidad, una gran masa que busca adaptarse a los tiempos venideros. Estamos en un momento de crisis política y sanitaria, y nos hemos dado cuenta que el sistema de salud en Chile es precario y por sobre todo los/las encargadas/os de esa área solo buscan el bienestar económico del Estado.

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